Introducción
Las
iglesias, en general, enseñan que el verdadero usted, la
persona real, vive en un cuerpo carnal, temporal.
Se dice que nuestro cuerpo carnal es semejante a un tipo de contenedor que es embalsamado cuando muere y enterrado en la tierra mientras que la persona real, el verdadero usted, es invisible, y se eleva hacia el cielo o tal vez a un infierno siempre ardiendo. Este algo etereo es conocido como el “alma”.
“Su
alma se ha separado del cuerpo y está ahora en el cielo con el
Señor”, es una creencia popular sobre la muerte. A
menudo el elogio alude a cualesquiera atributos de la persona muerta
que son adecuados, y concluye notando que la persona muerta está
actualmente más viva que nunca sin cuerpo. El cuerpo de la
persona está por ponerse bajo tierra, para esperar la
resurrección al cielo; sin embargo, el alma ya está ahí
de acuerdo con esta creencia popular.
No Hay Alma Inmortal en
las Escrituras.
La Palabra de Yahweh presenta una imagen del “alma” completamente diferente. Trate de encontrar la expression “alma inmortal” en algun lugar en la Biblia. ¡No está ahi, simplemente! En ningún lugar la Biblia declara que el alma o el cuerpo son naturalmente inmortales. De hecho, lo opuesto es la verdad. El alma puede ser destruida. El cuerpo no es el alma, porque Yahoshúa dijo que Yahweh es poderoso para destruir ambos, cuerpo y alma:
“...y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a Aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en la guehena. Mat. 10:28.
En algunas traducciones dice ahí “infierno”. La palabra aquí es el griego ‘gehenna’, que es también conocida como el tofet o los fuegos que destruyen basura quemada en el Valle de Hinom de Jerusalem. La Guehenna simboliza el destructor “lago de fuego” que aniquilará a los malos en la segunda muerte inmediatamente despues del juicio, Rev. 20:14.
Para
llegar a la verdad de la Palabra de Yahweh, debemos dejar de lado las
opiniones y creencias que no están de acuerdo con las
Escrituras. Esto es especialmente cierto de la palabra española
"alma". La Biblia enseña que el alma no es parte del
hombre, sino que es la persona viva misma, la vida que conforma todo
el hombre.
El Hombre es de la Tierra.
Adam fue
creado de los elementos de la tierra por el Maestro Alfarero. Después
se le dio la vida: “Y Yahweh Elohim formó al hombre del
polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida; y fue
el hombre un ser viviente”. Gen. 2.7
Yahweh sopló dentro de los pulmones de Adam el aliento (hebreo=neshamáh Número 5397, wind,{viento} vital breath {aliento vital} de vida y Adam se convirtió en un ser viviente (hebreo=néfesh). El hombre no posee un alma; el ES un alma, un ser viviente y sensible.
El hebreo néfesh, es traducido “alma” en español, y néfesh es “una creatura que respira”, i.e. animal o en abstracto, vitalidad; usado muy ampliamente en un sentido literal o figurado. La palabra correspondiente en griego es psujé, traducido ‘corazón, mente, vida y alma; y es la contraparte directa del néfesh hebreo. Néfesh ocurre 752 veces en el Antiguo Testamento y es traducida de 44 diferentes maneras. Nuestras palabras en español traducidas de néfesh cargan el significado primario de creatura, hombre, vida y persona.
El Griego psujé se encuentra 105 veces en el Nuevo Testamento. Es traducido “alma” 58 veces; “vida” y “vidas” 40 veces; y “mente” 3 veces; una vez se refiere a “tú”, “nosotros”, ”corazon”, “de todo corazón”. Este psujé es la directa contraparte de néfesh y se puede encontrar comparando Mat. 20:28 e Isa. 53:10, donde Mateo lee “vida”, e Isaías tiene “alma”. Otros versos son Hechos 2:27 y Salmos 16:10, Rom 11:3 y 1 Reyes 19:10. En ningún lugar en la Biblia ni una ni otra palabra connota inmortalidad.
Adam estaba para cuidar el jardín del Edén. Podía comer cualquier fruta con excepción de la de un árbol, para que no muriera. Si no hubiera comido de ese árbol , Adam aparentemente podría haber vivido para siempre. El tenía vida eterna en el plano físico.
Adam,
Noé, Metusalem, todos vivieron casi un milenio complete, mil
años. El ser humano volverá a vivir mucho en el plano
físico porque el último enemigo que será
destruido es la muerte. 1Cor. 15:26
Alma significa Vida.
En contraste con las erróneas y paganas enseñanzas sobre el alma (néfesh; psujé) como siendo algo inmaterial, intangible, invisible, inmortal, las Escrituras muestran que tanto psujé como néfesh con relación a criaturas físicas se refieren a lo que es material, tangible, visible y mortal. Es la vida misma.
Cuando Yahweh destruyó la tierra con el diluvio, Noé tomó con él animales que respiraban aire: “Vinieron, pues, con Noé al arca, de dos en dos de toda carne en que habia espíritu de vida”. Gen.7:15
“Todo lo que tenia aliento de espíritu de vida en sus narices, todo lo que había en la tierra, murió. Gen.7:22. Esto está en completo acuerdo con la declaración del rey Salomón que el hombre y la bestia todos respiran el mismo aire, tienen "un mismo aliento" (Hebreo rúaj, espiritu de vida) y “así como muere uno, así muere el otro”, Ecle. 3:19. Eclesiastés también nos dice que el hombre y la bestia son formados de la tierra, y al morir ambos vuelven a la tierra de nuevo:
“Todo va a un mismo lugar; todo es hecho del polvo, y todo volverá al mismo polvo. ¿Quién sabe si el espíritu de los hijos de los hombres sube arriba, y si el espíritu del animal desciende abajo a la tierra?” Ecle. 3:20-21.
Los
animales son seres sensibles, creaturas de menor inteligencia. Aunque
son dirgidos por instinto natural, los animales pueden también
ver, oír, oler, gustar y aprender. Ellos están en un
plano más bajo que los humanos, pero vienen de la misma fuente
de vida fisica (nuestro Creador), tienen sangre, músculos, y
huesos de acuerdo a sue specie. Los animales se mantienen ellos
mismos así como el ser humano.
Los Humanos Pueden
Razonar.
La diferencia más importante y obvia entre el hombre y el animal está en la calidad mental y el sentido moral del hombre. Aparte de eso tanto el hombre como el animal son una vida, un alma. Ninguno tiene alma inmortal.
Esta gran diferencia entre hombre y animal se basa en que el hombre fue creado a la imagen de su Creador. Yahweh ha provisto para que el hombre se levante sobre su estado carnal. El hombre posee una habilidad innata to conceptualizar una moralidad más elevada, emociones más profundas de amor y compasión, así como de odio y resentimiento.
Cada página de la Biblia es como una “carta de amor para la novia”. Al leer la Biblia encontramos nuestra invitación a la boda y la promesa de gloria a todos los que asistan a la cena de la boda. Los animales no son capaces de comprender tales promesas espirituales.
Como hemos visto anteriormente, el Rey Salomón rechaza la especulación pagana de que el ser humano posee alguna cualidad inherente y eterna que le permite continuar viviendo en un mundo invisible aun después de la muerte. Esta mentira dicha desde el principio por la serpiente, que el ser humano no muere realmente sino que tiene un alma inmortal que continúa viviendo después de la muerte, es ampliamente creída hasta nuestros días. La mentira dicha a Eva en el Huerto del Edén fue que el hombre vive para siempre como Yahweh, Quien es espíritu, no carne y hueso.
Yahoshúa mismo dijo que el diablo no está en la verdad, sino que mintió desde el principio y la primera mentira se la dijo a Eva:
“…..Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de lo suyo habla; porque es mentiroso y padre de toda mentira”. Juan 8:44
Debemos
pensar en la palabra “alma” como el significado basico de
“vida”; por ejemplo, si las noticias informan que un
barco se hundió y murieron cierto numero de almas. El mantener
el cuerpo y el alma juntos, simplemente significa “existir”,
“continuar viviendo”.
Néfesh y Psujé
Significan “Vida”
Si nos damos cuenta que “Néfesh y Psujé significan “vida” que es mortal, estamos en armonía con la Biblia. Yanto el Antiguo como el Nuevo Testamento enseñan que las almas pueden morir:
“Y cualquiera persona que hiciere trabajo alguno en este día, yo destruiré a la tal persona [néfesh] de entre su pueblo”. Lev. 23:30
“Y la tomaron el mismo día, y la hirieron a filo de espada; y aquel día mató a todo lo que en ella tenía vida [néfesh], como había hecho en Laquish”. Josué 10:35
“Dispuso camino a su furor; No eximió la vida de ellos de la muerte, sino que entregó su vida [néfesh] a la mortandad”. Sal.78:50
“He aqui todas las almas son mías; como el alma del padre, asi el alma del hijo es mia; el alma [néfesh] que pecare, esa morira”. Ez.18:4
“El seguno ángel derramó su copa sobre el mar, y éste se convirtió en sangre como de muerto; y murió todo ser vivo [psujé] que había en el mar”. Rev. 16:3
“y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a Aquel que puede destruir el alma [psujé] y el cuerpo [soma] en la guehena”. Mat. 10:28
De acuerdo a lo anterior aprendemos que la palabra “alma” lleva consigo el significado basico de “vida”. Las noticias pueden informar un desastre, como un tornado durante el cual un cierto número de almas se perdieron o murieron.
Debemos recordar que la palabra “infierno” versiones tradicioanles de Mateo es del griego guehena, que significa “basurero”, “crematorio”, y es explicada en nuestro folleto “Entendiendo el Infierno”. Solicite su copia hoy.
Destruir tanto el alma (la vida) como el cuerpo puede ser hecho también simplemente abandonándolos en la tumba. El cuerpo sin vida dejado en la tumba y no resucitado con el espítiru de vida está seguramente muerto. Si YAHWEH no infunde vida de nuevo dentro de ese cuerpo y lo levanta de la muerte, en un corto tiempo la corrupción se establece y el cuerpo regresa al polvo. Podemos decir que el cuerpo y el alma (psujé, vida) no existen ya más, y están muertas o destruidos. Esto es a lo que el Salvador hacía referencia. Solamente a través de Yahoshúa tenemos la promesa de una resurrección a la vida (Juan 11:25)
El
hombre no fue creado teniendo un alma inmortal, o teniendo vida
inmortal, sino que fue hecho a la imagen de su Creador, pero mortal.
El futuro del hombre no reside en sí mismo, sino en la
provisión que Yahwéh ha hecho para el ser humano de
llegar a ser Sus hijos e hijas através de la redención
que hay en Yahoshúa. “Él es el camino, la verdad
y la vida”. Juan 14:6 .
La Fuente de Vida
La Biblia claramente establece que hay vida después de la muerte, pero solamente en la resurrección prometida a través del Redentor de Israel. Hay solamente una Fuente de Vida más allá de la tumba, el Gran Sustentador y Dador de Vida desde el principio:
“Yahweh, el Único que tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible; a quien ningún hombre ha visto ni puede ver, a Quien sea la honra y el poder eterno”. 1Tim 6:16
Ahora entonces no somos inmortales. Solamente a través de Yahoshúa, Yahweh imparte vida eterna o inmortalidad. Cuando morimos, somos como los animales que perecen. Sin embargo, si durante nuestra estancia terrenal mantuvimos nuestros corazones y mentes en armonía con el gran llamado que tuvimos de parte de Yahweh y pacientemente lo buscamos, seremos recompensados con la inmortalidad que nos falta ahora, pero que continuamos buscando:
“Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Yahweh. El cual pagará a cada uno conforme a sus obras; vida eterna a los que, perseverando en bien hacer, buscan gloria y honra e inmortalidad”. Rom2:5-7.
Si ya tenemos un alma inmortal, ¿por qué necesitaríamos buscar la inmortalidad, la vida eterna? La inmortalidad es algo que no tenemos ahora, pero estamos en su búsqueda. Se nos ha prometido que si buscamos el Reino de Yahweh en la tierra, Él lo revelará a nosotros. Él nos ayudará a vencer y a ser dignos de estar de pie delante del Hijo del hombre, quien premiará a los fieles con la inmortalidad en el Reino.
Los que se levanten en la primera resurreccion serán convertido en seres espirituales para vivir por siempre y ser sacerdotes y reyes en el Reino bajo Yahoshúa. ¡Esta primera resurrección es para inmortalidad! Es entonces cuando seremos hechos inmortales:
“Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección, la segunda muerte no tiene potestad sobre éstos, sino que serán sacerdotes de Yahweh y del Mesías, y reinarán con él mil años”. Rev. 20:6
La segunda muerte mencionada aquí es el “lago de fuego” el cual quemará la escoria y toda maldad (v. 10). La tierra ha de someterse a un fuego purificador, que va a destruir a los adversarios. Los que están en la primera resurrección no se verán perjudicados por el fuego, porque entonces se hacen inmortales por su cambio de espíritu. En ellos el fuego abrasador no tiene poder, Rev. 20:6. Pablo describe el cambio que tiene lugar cuando Yahoshúa regresa en la áltima trompeta. Tanto los santos vivos como los muertos serán transfromados de cuerpo físico a cuerpo espiritual:
“...en
un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque
se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados
incorruptibles, y nosotros seremos transformados. Porque es necesario
que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal
se vista de inmortalidad. Y cuando esto corruptible se haya vestido
de incorrupción, y esto mortal se hay vestido de inmortalidad,
entonces se cumplirá la palabra que esta escrita: Sorbida es
la muerte en Victoria”. 1Cor. 15:52-54
“Estar
muerto” se describe como “estar dormido”
En lugar de un alma inmortal revoloteando en el cielo, la Biblia enseña que los que mueren están en un estado de "sueño”, y se despiertan a la vida por Yahoshúa. Él dijo de la muerte de Lazaro: “Nuestro amigo Lázaro duerme; mas voy para despertarle. Juan 11:11
Lucas dijo de Esteban, el mártir: “Se ha dormido” Hechos 7:60. Y “David durmió” Hechos 13:36
Pablo usa la misma expression varias veces: “El Mesías ha resucitado de la muerte y ha llegado a ser las primicias de los que durmieron” 1Cor. 15:20
No tenemos un alma inmortal, pero seremos hechos inmortales por el Mesías. Los santos que estén dormidos en la muerte y los que estén vivos durante Su venida, entraremos al reino espiritual y tendremos un cuerpo como el de Yahoshúa: 1 Juan 3:2; Rom6:5. Debemos luchar para estar en esa primera resurrección y disfrutar las bendiciones de ser las primicias, Santiago 1:18.
El
Apostol Pablo es muy claro al describer que Yahoshúa regresa y
tanto vivos como muertos serán transfromados en seres
espirituales, serán hechos inmortales, 1Cor 15:50-54. El hecho
de que seamos hechos inmortales depende de nuestra obediencia a
Yahweh y a Yahoshúa con lo cual demostramos nuestro amor.
“Porque esto es el amor a Yahweh, que guardemos Sus
mandamientos; y Sus mandamientos no son gravosos. 1Juan 5:3
©
2007, 2014 Yahweh's Assemby in Yahshua
© 2018 Traducido para
Asamblea de Yahwéh
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